Vigilantes

 Los líderes efectivos deben decidir cómo ellos y sus organizaciones deben moverse y dar dirección a los demás. Los líderes no son innatos ni se nutren de la educación. Cualquiera puede ser un líder si está analizando, conectando y cambiando constantemente.

En todas las épocas, la Biblia declara que los servidores públicos desempeñaron un papel importante en la evangelización y las misiones. Por ejemplo, José y Moisés sirvieron como modelos para las misiones de evangelización mientras disfrutaban de las bendiciones del trono y el poder que trascendía el tiempo y el espacio. En esta época en la que la espiritualidad se ha secado, Dios te ha llamado a salvar a los servidores públicos.

Dios es quien protege a su pueblo y establece reyes. Entre ellos, los servidores públicos sirven como vigilantes. En silencio, los servidores públicos deben utilizar el poder espiritual y derramar su fuerza en la oración. El trabajo que implica el uso de mucha fuerza es una batalla espiritual, por lo que los servidores públicos no tienen que preocuparse por nada más.

Los servidores públicos deben cultivar la fuerza espiritual y actuar como atalayas para la posteridad. La clave es nutrir a la posteridad. Además, los servidores públicos deben actuar como ciudad de refugio para quienes han cometido errores y para prevenir futuros delitos. Darles respuestas y oportunidades espirituales es la misión de los servidores públicos para comenzar de nuevo.

Antes de que José entrara en el campo del servicio público, vio las bendiciones de antemano y Daniel salvó a las personas de situaciones difíciles. Cuando llegó la crisis, Abdías y Ester se ofrecieron como voluntarios en lugar de huir. ¡¡Ustedes son pueblo de Dios, que hoy vencerán como un líder espiritual que salva a todas las personas !! Oro por ti con amor. 12/03/2021.